El Instituto Nacional de Migración (INM) asegura que sus agentes no intentaron ingresar por la fuerza a un albergue de migrantes en Tijuana, como lo muestra el video de una cámara de vigilancia.
Durante esta semana, Borderline Crisis Center, un albergue para migrantes cerca de El Chaparral, acusó a agentes de la Guardia Nacional y del INM de amedrentar a sus refugiados con la intención de irrumpir en el lugar.
Sin embargo, tras los señalamientos, el INM emitió un comunicado destacando que las acciones de sus agentes, que estaban acompañados por elementos de la Guardia Nacional, eran parte de una inspección migratoria.
Los agentes quedaron captados en un video de vigilancia
Judith Cabrera de la Rocha, directora del albergue Borderline Crisis Center, denunció los actos de hostigamiento en contra de los migrantes, en su mayoría mujeres y niños, exigiendo un alto por parte de las autoridades.
Borderline Crisis Center es un refugio de emergencia para las familias migrantes, que tienen oportunidad de tener un lugar para pasar al menos tres días, y se ubica en las inmediaciones del Puente México.
Organizaciones en apoyo a los migrantes destacan que bajo la ley mexicana es ilegal que las autoridades realicen este tipo de inspecciones de inmigración cerca de los refugios. Sin embargo, señalan que estas acciones no cesan.
Autoridades migratorias aseguran que fue un recorrido de rutina
El INM reconoció que sus agentes realizaron un recorrido rutinario en la zona alrededor de la una de la mañana del miércoles 11 de octubre y les pareció sospechoso el lugar en donde está ubicado el albergue, debido a que lo describen como “un edificio muy deteriorado y vandalizado”.
Los agentes habrían realizado un “llamado” en la cortina que cubre la entrada del lugar tras detectar por las ventanas casas de campaña y personas alojadas, pero aseguran que al no obtener respuesta decidieron retirarse.
“No hubo intento por ingresar al inmueble, en todo momento se buscó establecer comunicación con quienes estaban dentro del edificio y al no haber respuesta los agentes se retiraron del lugar”, destaca el INM.
Sin embargo, Cabrera señaló que los agentes permanecieron ahí alrededor de 15 minutos, tiempo en el que golpearon la cortina de acero y acusaron a los refugiados de traficar con personas hacia Estados Unidos.
La institución destacó que la zona es un punto de reunión tanto para los migrantes como para traficantes de personas, quienes los incitan a realizar cruces masivos por la canalización del Río Tijuana.