Las bancadas de derecha del Congreso del Perú se han convertido en el soporte político de la presidenta Dina Boluarte, quien llegó al cargo en la fórmula presidencial del izquierdista Pedro Castillo y asumió la presidencia tras el fallido golpe de Estado del 7 de diciembre pasado. Este martes, 64 congresistas de las bancadas de Fuerza Popular (fujimorismo), Renovación Popular, Avanza País, Alianza para el Progreso y Somos Perú rechazaron continuar con el proceso de moción de vacancia contra Boluarte presentada por las bancadas de izquierda por las muertes de 49 civiles ocurridas en el contexto de las protestas contra el Gobierno.
Tras la decisión del Congreso, el presidente del Consejo de Ministros, Alberto Otárola, agradeció a quienes votaron en contra de la moción: “agradecer a las fuerzas democráticas que están en sintonía con los 33 millones de peruanos que quieren paz, desarrollo, tranquilidad (…) lo que necesita el gobierno es trabajar y este tipo de mociones de vacancia lo que hacen es distraer”. Las bancadas que han rechazado la moción de vacancia contra Dina Boluarte son las mismas que promovieron tres procesos de vacancia contra su antecesor Pedro Castillo que no fueron aprobadas por cuenta de la posición de la izquierda que hoy quiere vacar a Boluarte.
El Congreso peruano también ha dado curso a dos procesos políticos paralelos contra ministros del gobierno de Boluarte. Hacia la medianoche del martes, el pleno del Congreso rechazó una moción de censura contra el ministro del Interior Vicente Romero a quien se ha acusado de irregularidades y abusos en un operativo policial dentro de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, la más antigua de América, en donde estaban alojados ciudadanos del interior del país que habían viajado a Lima para protestar contra el Gobierno. En este caso hubo 60 votos en contra de la censura y 42 a favor.
La situación del ministro de Defensa Jorge Chávez Cresta es un poco más complicada. El martes atendió una larga sesión de interpelación por la muerte de 6 soldados durante una confusa situación con civiles en el río Ilave, en Puno, en el sur del país. Los soldados perecieron ahogados cuando intentaban cruzar el río en medio de choques con civiles que los estaban obligando a retirarse de la zona. En el caso del ministro de Defensa se han unido las bancadas de izquierda y de derecha y ya están promoviendo una moción de censura que, si no hay hechos nuevos en los próximos días, sería aprobada por una amplia mayoría.