El responsable de la expedición arqueológica, Elder Antesana, precisó que encontraron objetos de cerámica como platos, botellas, aríbalos, k’eros de madera, piezas metálicas como lentejuelas, tupus (prendedores), dijes, esculturas zoomorfas en miniatura, cuentas de forma circular en crisocola y spondylus, y otros objetos.
Los restos, según la investigación arqueológica, datan de diferentes estadíos de las épocas preinca, inca e inca colonial. Además, se registra la influencia de Sillustani y Pacajes, culturas que corresponden al Altiplano.
Otro detalle que resalta es que los restos fueron hallados en fosas funerarias de forma circular y rectangular, construidas en piedra y tapiadas con líticos finamente labrados, a diversas profundidades.
Los hallazgos en K’anamarca se dieron a conocer al término de los trabajos de restauración. De acuerdo a la Dirección de Cultura de Cusco, el proceso duró cuatro años y se invirtió más de S/ 6 millones (US$ 1,6 millones). Ahora, el alcalde del distrito de Alto Pichigua, Ramiro Valer, anunció la implementación de un programa de promoción y difusión turística hacia la zona.