Ambientalistas están exhibiendo los daños irreparables que se han ocasionado en un sistema de cenotes y cavernas en Quintana Roo, México, debido a perforaciones por la construcción en el Tramo 5 del Tren Maya.
Durante las últimas semanas se han realizado varias perforaciones y se han instalado una serie de pilotes que están atravesando cuevas subterráneas en este tramo del tren, una “megaobra” que el presidente Andrés Manuel López Obrador pretende inaugurar en febrero.
De hecho el gobierno federal aseguró que no habría un impacto en el ecosistema que rodea el Tren Maya, incluso se han planteado cambios para desviar la ruta y salvaguardar algunas áreas.
Sin embargo, estos cimientos de acero y concreto eventualmente contaminarán el agua de estos cenotes, además de que están destruyendo patrimonio geológico y arqueológico y afectando a especies endémicas, de acuerdo con los señalamientos de los expertos.
Dos cuevas afectadas por las perforaciones
Mientras los trabajos de construcción van a marchas forzadas, un grupo de ambientalistas y activistas han documentado los daños más recientes provocados en dos importantes cavernas en la Riviera Maya.
Una de las cuevas es Manitas y la otra se llama Oppenheimer, recientemente descubierta por el guía de turistas Elías Siebenborn, ambas conectadas y formando una de las redes de aguas subterráneas más grande del mundo.
El hidrólogo y espeleólogo Guillermo DChristy realizó una expedición en Oppenheimer, recientemente junto con un grupo de activistas, documentando al menos 12 perforaciones para pilotes a lo largo del sistema de cavernas de Aktun Tuyul; del que forman parte ambas cuevas.
DChristy compartió las pruebas en redes sociales, explicando que eventualmente ese acero se va a corroer y se contaminará el acuífero subterráneo. Siebenborn también ha recurrido a este medio para exhibir los daños tan graves a estos sistemas.
Además de la riqueza ecológica, Manitas alberga pinturas rupestres que se atribuyen a los Mayas y fue debido a estos vestigios arqueológicos que el Tramo 5 fue desviado 30 metros, sin que se tuviera idea de que ahí afectarían otra importante caverna, Oppenheimer, que fue descubierta a raíz de este cambio.
No son los únicos daños ambientales documentados
No son los únicos daños ocasionados por la construcción del Tren Maya, estás son tan solo dos de las más de 100 cavernas afectadas en la Riviera Maya, desde Playa del Carmen hasta Tulum.
Además, en la superficie se han colocado más de 8 mil pilares, algunos de los cuales ya presentan problemas de calidad y que acusan puede causar daños en el suelo cárstico y dentro de un acuífero con alta concentración de cloruros.
Y para dar paso a la zona de construcción del Tren Maya, estiman que se han derribado más de 10 millones de árboles.