Padres de familia de las escuelas primarias Calpulli y Vicente Suárez llevaron a cabo una protesta pacífica al tomar las instalaciones de la Delegación Tijuana de la Secretaría de Educación Estatal. Esta acción fue motivada por la creciente preocupación ante la falta de maestros que afecta a sus hijos.
Los padres expresaron que la ausencia de personal docente ha comprometido la calidad de la educación que reciben los alumnos, lo que ha llevado a un impacto negativo en su aprendizaje y desarrollo escolar.
Durante la protesta, demandaron soluciones inmediatas por parte de las autoridades educativas, exigiendo la asignación de más maestros para atender la necesidad educativa de sus hijos.
La situación ha generado un sentimiento de urgencia entre los padres, quienes temen que la falta de maestros continúe afectando el futuro académico de los estudiantes. Las autoridades educativas aún no han emitido un pronunciamiento oficial sobre la situación.
