Durante la última fecha de los cuadrangulares finales del fútbol profesional colombiano, en los estadios de la ciudad de Medellín y Cali se presentaron desmanes. El primer hecho ocurrió en el estadio del deportivo Cali, donde ante un gol invalidado, los hinchas del equipo local ingresaron a la cancha de manera violenta, por lo que el juez tuvo que terminar el juego por falta de garantías.
Los jueces del partido fueron atacados en el estadio Palmaseca del Deportivo Cali
Jaime de la Pava técnico del Deportivo Cali habló de lo ocurrido: “Son excesos de cosas que son muy complejas, difíciles de controlar”
En el segundo hecho, en el estadio de Envigado, donde jugaba Atlético Nacional de local contra Independiente Medellín, los hinchas del conjunto verde iniciaron una pelea entre ellos, lo que alteró el orden público y los jueces determinaron dar por terminado el partido ante los hechos de violencia.
A la salida del estadio hinchas de Atlético Nacional atacaron violentamente un vehículo donde se movilizaban hinchas del equipo rival
Alfredo Arias, técnico del Independiente Medellín, habló en rueda de prensa de lo corrido: “A mí me hubiese gustado que hubiéramos podido terminar el partido, lógicamente, pero bueno son circunstancias que debemos mejorar como sociedad, como fútbol”
“La verdad que nos vamos muy tristes por el resultado y cómo nos vamos con nuestra hinchada, lo acontecido, porque no se pudo terminar un partido, eso no se espera nunca, ni uno como jugador de fútbol ni nadie, siento que es algo doloroso, personalmente no me había tocado” dijo John Duque, jugado de Atlético Nacional.
En la salida del estadio Polideportivo sur, hinchas de Nacional atacaron un vehículo en el que se movilizaban seguidores del equipo rival. La Dimayor, el ente que rige el fútbol en Colombia, ha determinado medidas de fondo para prevenir este tipo de hechos en los escenarios deportivos del país, y sanciones a los responsables.