La Organización de Estados Americanos (OEA) afirmó que la institucionalidad electoral de la República Dominicana salió fortalecida en los pasados comicios presidenciales y congresuales, recomienda tomar acciones para evitar la compra de votos en los recintos electorales.
El órgano regional entiende que hubo mejoras “significativas” con respecto a las municipales de febrero pasado, entiende necesario ajustar algunas recomendaciones para superar algunos temas identificados durante la jornada de observación.
La Misión de Observación Electoral (MOE) de la OEA estuvo encabezada por el expresidente de Chile Eduardo Frei, donde se establece que debe ser un compromiso de todos los actores del proceso, continuar desarrollando acciones y políticas que permitan combatir y exterminar este flagelo.
Frei saludó el espíritu cívico y democrático que demostraron los dominicanos al acudir a las urnas el domingo, además de felicitar al presidente del país, Luis Abinader, por ser reelegido para un mandato de cuatro años.
La MOE también reconoció el “gran trabajo” de la Junta Central Electoral (JCE), organismo responsable de la organización y celebración de los comicios, y opinó que el órgano dominicano asumió un decidido compromiso por implementar las recomendaciones de la OEA formuladas luego de las elecciones municipales de febrero, así como por la receptividad que ofreció a las solicitudes planteadas por todos los partidos políticos.
Entre estas figuran extender las pruebas de carga y estrés a la funcionalidad del sistema de cómputo electoral relativa a la liberación de boletines en las juntas electorales, con el fin de evitar la ralentización observada entre la recepción central de las actas y la liberación de los boletines por parte de las juntas.
Asimismo, iniciar con la divulgación de resultados a la ciudadanía vía web al mismo tiempo que inicia el acceso de medios de comunicación y partidos políticos, con el objeto de no generar la percepción de que la publicación web de resultados está interrumpida.
También sugirió diseñar boletas electorales de diferente color para cada nivel de votación y que dicho color se corresponda con la urna en que cada papeleta debe ser depositada. En ese orden, realizar pruebas y revisiones para comprobar que el color o cantidad de tinta de las boletas o de los marcadores no genere inconvenientes a la hora de ejercer el voto.
El organismo recomendó revisar la redacción de la normativa que tipifica las conductas sujetas a sanción penal, a fin de garantizar tipos penales cerrados, que describan circunstancias expresas e inequívocas.
Propuso nombrar dos años antes de la elección y por concurso, a la persona al frente de la Procuraduría Especializada para la Investigación y Persecución de los Crímenes y Delitos Electorales.
La OEA refirió que las garantías para la equidad en las elecciones, favorecidas por el acceso al financiamiento público, entre otros factores, deben ir acompañadas del estricto cumplimiento de las obligaciones de transparencia y rendición de cuentas por parte de las organizaciones políticas y las candidaturas.
Lo propio hizo con los gobiernos de Brasil, Canadá, Corea del Sur, Estados Unidos, España, Francia, Italia y Países Bajos que aportaron los recursos para el despliegue de la Misión.