En una entrevista desde Bogotá, el canciller Luis Gilberto Murillo se pronunció en contra de la propuesta del presidente electo de Panamá, José Raúl Mulino, de cerrar la peligrosa ruta migratoria del Darién que conecta a ambos países.
“Colombia no estaría de acuerdo con el cierre de fronteras y menos obviamente la frontera del Darién“, afirmó Murillo, destacando la necesidad de ofrecer salidas más humanitarias para la población que cruza por esa zona.
El cierre de esta ruta fue una de las principales promesas de campaña de Mulino, elegido recientemente como nuevo mandatario de Panamá. Sin embargo, Murillo señaló que Colombia busca continuar las conversaciones al respecto y manifestó la importancia de garantizar una movilidad segura y regular para las personas que atraviesan la región.
En el año 2023, más de 520.000 personas, incluyendo niños, cruzaron el Darién exponiéndose a múltiples peligros como animales salvajes, ríos caudalosos y bandas criminales.
Ante las declaraciones del futuro ministro de Seguridad de Panamá, Frank Ábrego, sobre la posibilidad de deportar a los migrantes que crucen hacia su país, Murillo expresó confianza en que estas medidas no se materialicen, señalando que existen acuerdos en el marco de la declaración de Los Ángeles sobre migración que apuntan en una dirección diferente.
La mayoría de los migrantes que transitan por esta ruta son venezolanos, haitianos, ecuatorianos y colombianos, con destino principalmente hacia Estados Unidos, así como también asiáticos y africanos.
Luis Gilberto Murillo asumió como ministro de Relaciones Exteriores de Colombia la semana pasada, ocupando el cargo tras una inhabilitación de su antecesor, Álvaro Leyva. Murillo había estado desempeñándose como canciller encargado y embajador ante Estados Unidos.