En una sesión maratónica y de intensas negociaciones, la Organización de Estados Americanos (OEA) no logró aprobar una Resolución que demandaba mayor transparencia en las recientes elecciones presidenciales de Venezuela y el cese de la persecución política en el país. La iniciativa, respaldada por Estados Unidos, Argentina, Uruguay y Paraguay, quedó estancada debido a la abstención de varios países clave, incluyendo Colombia, Brasil y la ausencia de México.
El resultado de la votación mostró una clara división entre los estados miembros de la OEA. De los 33 países presentes, 17 votaron a favor de la Resolución, mientras que 11 se abstuvieron y 5 no estuvieron presentes durante la votación. De acuerdo con las normas de la OEA, se requerían al menos 18 votos a favor para que la Resolución fuera aprobada, dado que los votos ausentes se cuentan como negativos. La falta de una mayoría especial significó el rechazo de la propuesta.
el gobierno colombiano ha recibido múltiples criticas por no haber votado a favor
La Resolución pretendía exigir al Consejo Nacional Electoral de Venezuela la publicación inmediata de los resultados de las elecciones del 28 de julio de 2024 y llevar a cabo una verificación exhaustiva con la presencia de observadores independientes. Además, buscaba resaltar la necesidad de proteger los derechos humanos y garantizar la seguridad del proceso electoral. Sin embargo, la propuesta enfrentó una dura oposición liderada por Brasil, México y Colombia, que optaron por abstenerse en lugar de apoyar el proyecto.
La postura de los presidentes Gustavo Petro (Colombia), Luiz Inácio Lula da Silva (Brasil) y Andrés Manuel López Obrador (México) contrastó con la de sus pares en Argentina y Paraguay, Javier Milei y Santiago Peña, quienes, junto con Estados Unidos, intentaron generar consenso en torno a la Resolución. La estrategia buscaba crear una presión internacional sobre el régimen de Nicolás Maduro, pero se encontró con un bloque de abstenciones que impidió la aprobación de la medida.
Durante la larga jornada de discusiones en la sede de la OEA, Estados Unidos, Argentina, Paraguay, Uruguay y Chile intentaron presentar un frente unido para denunciar los abusos del régimen venezolano. Sin embargo, la propuesta de Brasil, Bolivia, Colombia y México se inclinó hacia una postura menos confrontativa, evitando confrontar directamente al gobierno venezolano.
El proyecto de Resolución no aprobado incluía los siguientes puntos clave:
Reconocimiento de la participación pacífica del electorado en las elecciones de julio.
Exigencia para que se publiquen los resultados de la votación y se realice una verificación completa por observadores independientes.
Prioridad en la salvaguarda de los derechos humanos en Venezuela, incluyendo el derecho a la manifestación pacífica.
Protección de los equipos electorales para asegurar la cadena de custodia del proceso.
Solidaridad con el pueblo venezolano y compromiso de mantener la atención en la situación del país.
El rechazo de esta Resolución ha proporcionado un respiro político para Nicolás Maduro, quien ha intensificado su represión interna y roto relaciones diplomáticas con países críticos. La postura de Brasil, México y Colombia ha jugado un papel crucial en fortalecer al régimen de Maduro, marcando un giro significativo en la dinámica regional en torno a Venezuela.