El Gobierno panameño en el mando de José Raul Mulino tomo medidas para los migrantes que cada día llega a suelo panameño por e tramo de la Selva del Darién que conecta Colombia y Panamá, estableció multas de entre mil y cinco mil dólares “a toda persona extranjera” que ingrese irregularmente al país por la frontera con Colombia, sanción que, sin embargo, se ajustará a las condiciones de los inmigrantes.
La medida señala la violación a los puestos de control migratorio oficialmente habilitados y, en consecuencia, la configuración de una infracción migratoria administrativa, sin embargo se tomará en cuenta la vulnerabilidad de los migrantes y una posible deportación.