En un importante anuncio realizado a través de su cuenta en X, el presidente Gustavo Petro reveló que el Gobierno adquirió un lote de 300.000 pastillas de Dolutegravir, un medicamento clave en el tratamiento del VIH. Según el mandatario, este fármaco no solo permite controlar el virus y prevenir el desarrollo del SIDA, sino que también puede evitar la transmisión del VIH a otras personas.
El presidente destacó que el Dolutegravir es “imposible para un trabajador o sus hijos” debido a su alto costo en el mercado, lo que ha dificultado el acceso a este tratamiento para la población más vulnerable. En su mensaje, Petro explicó que las EPS (Entidades Promotoras de Salud) no recetaban este medicamento debido a su elevado precio, lo que ocasionó que muchas personas murieran de sida cuando podrían haber evitado la enfermedad con un tratamiento adecuado.
Sin embargo, el Gobierno, a través del Ministerio de Salud, ha logrado negociar la compra de este lote de medicamentos a un precio mucho más bajo, lo que permitirá que los pacientes con VIH accedan a él de manera más asequible. Petro reafirmó su compromiso de reducir al máximo la propagación del VIH en el país, asegurando que esta medida es parte de una estrategia más amplia para mejorar la salud pública y garantizar el bienestar de la población.
Preocupación por la escasez de medicamentos para enfermedades reumáticas
A pesar de este avance en el tratamiento del VIH, la situación del sistema de salud colombiano sigue siendo compleja. La Asociación Colombiana de Reumatología emitió una alerta por la falta de medicamentos para tratar enfermedades reumáticas autoinmunes, como la artritis reumatoide, el lupus eritematoso sistémico, las vasculitis y la esclerosis sistémica, patologías que requieren un manejo continuo para evitar complicaciones graves.
La entidad solicitó a las autoridades de salud y a los prestadores de servicios médicos que implementen estrategias para asegurar el acceso oportuno a estos medicamentos. También hizo un llamado a la Superintendencia de Salud para realizar un monitoreo más riguroso del suministro de fármacos, destacando la necesidad urgente de garantizar la continuidad de los tratamientos para estos pacientes.
Este llamado se suma a las preocupaciones previamente expresadas por la Asociación Colombiana de Neumología Pediátrica, que ha denunciado dificultades en la dispensación de medicamentos esenciales para niños con enfermedades crónicas como fibrosis quística e hipertensión pulmonar.
Crisis de desabastecimiento y la importancia de una reforma en el sistema de salud
Estos problemas reflejan una crisis más profunda en el sistema de salud del país, donde la escasez de medicamentos y las demoras en la entrega están afectando gravemente a los pacientes, especialmente a aquellos con enfermedades crónicas que requieren tratamientos constantes. Factores como la burocracia, el desfinanciamiento del sistema de salud y la falta de coordinación entre los actores del sector están contribuyendo a esta crisis sanitaria.
El Gobierno, mientras se enfrenta a esta situación, ha expresado su compromiso de continuar con las reformas necesarias para mejorar la infraestructura y el acceso a los medicamentos esenciales. No obstante, la solución a estos problemas requerirá un esfuerzo conjunto de las autoridades sanitarias, las EPS, y los prestadores de servicios médicos para garantizar que los pacientes reciban el tratamiento que necesitan sin mayores demoras ni barreras económicas.