El futbolista mexicano Santiago Giménez fue presentado oficialmente como nuevo jugador del AC Milan, en un evento en el que estuvo acompañado por Zlatan Ibrahimovic. Durante su comparecencia ante los medios, el delantero expresó su felicidad por unirse a uno de los equipos más emblemáticos del fútbol europeo y dejó claro su compromiso con el club.

Un sueño hecho realidad
A sus 23 años, Giménez destacó que jugar en Europa siempre fue una meta personal y que ahora está cumpliendo un sueño más grande: vestir la camiseta de un club histórico.
“Uno de mis mayores sueños cuando era niño era llegar a Europa. Hoy lo he cumplido. Ahora mi gran motivación es dejar huella en este club tan histórico”, declaró el exjugador del Feyenoord.
Compromiso con el equipo
El Bebote, como es conocido, pidió que no se le mida solo por la cantidad de goles que pueda marcar, sino por su entrega dentro del campo.
“Lo que sí puedo prometer es que voy a dejar todo dentro del campo. No creo en individualismos, sino en el equipo, y creo que tenemos un gran grupo que puede competir de muchas maneras”, enfatizó.

Su estilo de juego y el respaldo de Zlatan
Con 1.82 metros de altura y una físico privilegiado, Giménez mencionó su admiración por Ibrahimovic y aseguró que la pasión y la potencia son sus principales cualidades.
“Siempre seguí a Zlatan, no solo por lo que hacía dentro del campo, sino por lo que representaba fuera de él. Ser jugador del Milan es maravilloso para mí”, afirmó.

Por qué no firmó antes con el Milan
En cuanto a las ofertas pasadas del AC Milan, Giménez explicó que siempre tuvo el objetivo de unirse al club y que su enfoque fue seguir trabajando hasta que la oportunidad llegara.

“Cuando no se dio lo del Milan en verano, solo me enfoqué en trabajar y jugar, porque sabía que las puertas estaban abiertas. Ahora que estoy aquí, voy a entregar todo para dejar huella”, recalcó.
Giménez y el Milan: una combinación perfecta
El delantero aseguró que el Milan es el club ideal para él, debido a su pasión, hambre de ganar y tradición.

“Veo al Milan como un traje a la medida para mí, porque es un club con pasión, poder y ganas de trascender. Este club me queda perfecto y haré todo para dejar una huella aquí”, concluyó.