A solo 30 minutos al noroeste de Tokio se encuentra Kawagoe un destino turístico muy popular Una ciudad fortificada del período Edo conocida por sus antiguos almacenes de arcilla y casas de comerciantes llamadas Kurazukuri, un importante templo budista conserva restos del antiguo Castillo de Edo. Alli se encuentra el grupo Gohyaku Rakan, con más de 500 estatuas de piedra de discípulos de Buda.
El símbolo de la ciudad es el “Toki no Kane” (Campana del Tiempo), Justo al lado se ubican las confiterías tradicionales japonesas que se alinean en el Callejón de los Dulces de la era Meiji. Kita-in una de ellas es Fukuro-Ya, una tradicional confitería japonesa fundada en el año 1875
Takayuki Suzuki/Propietario Fukuro-Ya Café Confitería
Todos nuestros dulces, incluyendo el cheesecake de estilo occidental, son completamente artesanales. No utilizamos ningún tipo de aditivo, por lo que pueden ser consumidos con total tranquilidad tanto por niños como por adultos.”
Fukuro-Ya ofrece dulces clásicos ideales como el “Monaka con campana” y el “Dorayaki”, el actual propietario, con formación en la cocina francesa, ha creado una fusión de sabores japoneses y occidentales que ha conquistado a muchos visitantes, y es que la ciudad de
Kawagoe, también es conocida como el Pequeño Edo, la ciudad de la repostería tradicional japonesa, como la transformación de granos de frejol en un maravilloso confite, el wagashi,
que con un toque ligero crea un delicioso grano, una poesía de sabor mediante técnicas tradicionales.
Megumi Abe / Vocera, Koedo Mame-ya
En Koedo Mameya, ofrecemos más de 100 variedades de frijoles. Hay opciones dulces, así como saladas que son ideales para acompañar bebidas alcohólicas. Además, durante el verano también vendemos productos como raspados y helados.”
La historia de los dulces de granos se remonta al periodo Edo (1603-1867), lo que significa que su sabor ha sido refinado por generaciones de hábiles artesanos.
El wagashi es delicioso como parte de la comida diaria, como postre, un capricho que combina lo mejor de las recetas tradicionales y modernas y también es un regalo perfecto.
Kawagoe prosperó como proveedor de materias primas para Tokio, aun conserva un ambiente que recuerda a un casco antiguo de aquel periodo que nos evocan a disfrutar un viaje al pasado, y experimentar la auténtica cultura y sensibilidad japonesas en una ciudad donde el visitante local o extranjero puede gozar de una estadía de gran valor en posadas de larga trayectoria tradicional
Yohei Imai / Propietario del Ryokan Matsumuraya, posada tradicional japonesa.
“El Ryokan Matsumuraya tiene una historia de aproximadamente 160 años, y yo soy la séptima generación. Hoy en día, recibimos huéspedes no solo de Japón, sino también del extranjero.”
Alojarse en una posada de esas características es como retroceder cientos de años atrás, una experiencia fascinante y de gran historia…
Por sus calles también podemos encontrar una tienda de antigüedades donde evalúan artículos valiosos como pinturas japonesas esculturas y son expertos especializan en algo muy tradicional
Fumiko Sato / Propietaria, Ichino kura
En nuestra tienda nos especializamos principalmente en espadas antiguas. Sin embargo, deseamos ampliar nuestra colección con muchas piezas de las eras Meiji y Taisho
Además, el número de visitantes extranjeros ha ido aumentando año tras año, lo que nos motiva a ofrecer una experiencia más enriquecedora y accesible para todos.
Espadas, antigüedades y tasaciones de espadas, técnicas antiguas, espadas atemporales etc solo star en la tienda una persona se transporta a un mundo diferente y de mucha sabiduría ancestral…
Kawagoe una ciudad que todavía respira el ambiente del período edo en sus tradicionales calles